ENFERMEDADES DEL SISTEMA NERVIOSO PERIFÉRICO

neuropatía periférica

¿QUÉ ES LA NEUROPATÍA PERIFÉRICA?

La neuropatía periférica es cualquier lesión de la fibra nerviosa que cuando compromete a un solo nervio se denomina mononeuropatía y cuando afecta a múltiples nervios, polineuropatía.

De acuerdo a su lugar de emergencia , los nervios se clasifican en dos grandes grupos: los nervios craneales y los raquídeos. Cada nervio raquídeo (31 pares) esta conectado a la médula espinal por dos raíces: la raíz anterior y la raíz posterior. Las fibras nerviosas están compuestas por los axones y las células de la glía que los envuelven. Algunos axones son envueltos por una sustancia aislante conocida como mielina, similar a la cubierta plástica de los cables eléctricos de nuestras casas. Por su función hay tres tipos de fibras nerviosas:

  • La fibras nerviosas sensoriales, se encargan de recabar la información mediante unos receptores situados básicamente en la piel del cuerpo y transmitirla hacia la médula. De manera permanente, aunque no siempre somos conscientes de ello, estos receptores están informando al cerebro sobre la temperatura, la posición de las extremidades, el tacto y el dolor. Por ejemplo, el pinchazo de un clavo en la planta del pie, genera una descarga intensa a nivel de estos receptores, que emiten un impulso gigante que en menos de 240 milisegundos llega al área sensorial del cerebro y recién retiramos el pie.
  • Las fibras motoras, se encargan de conducir el impulso eléctrico desde la médula hasta el órgano efector (músculo).
  • Los nervios autónomos controlan la frecuencia cardiaca, la presión arterial, los esfínteres

¿CUÁLES SON LAS CAUSAS?

El daño a los nervios periféricos son causados por una serie de afecciones, estas incluyen los siguientes:

  • Diabetes mellitus: es la causa más frecuente. Provoca compromiso de múltiples nervios (por ejemplo, la polineuropatía simétrica distal) y neuropatías focales (verbigracia, síndrome del túnel carpiano).
  • Enfermedades autoinmunes: artritis reumatoide, vasculitis, lupus, Sjogren, síndrome Guillain Barre.
  • Deficiencia de vitamina B y E.
  • Infecciones virales y bacterianas.
  • Trastornos hereditarios (enfermedad de Charcot Marie Tooth)
  • Tumores benignos y malignos
  • Trastorno de la médula ósea: proteína anormal en la sangre (gammapatias monoclonales),  cáncer de hueso (mieloma múltiple)
  • Otras enfermedades: hipotiroidismo, alcoholismo,  medicamentos, exposición a tóxicos, enfermedad hepática y renal

¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE LA NEUROPATÍA PERIFÉRICA?

  • Dolor agudo, urente, punzante o pulsátil.
  • Entumecimiento y hormigueos en manos y pies que puede extenderse a los brazos y piernas.
  • Sensibilidad aumentada al tacto.
  • Sensación de estar usando guantes o calcetines
  • Falta de coordinación y caídas.
  • Variación de la  presión arterial que provoca mareos o vértigo.
  • Parálisis y debilidad

¿CÓMO SE DIAGNÓSTICA?

Se diagnóstica utilizando el siguiente método:

  • Historia clínica completa: en esta parte del proceso diagnóstico el médico recaba la información de los síntomas, indaga sobre el estilo de vida, exposición a toxinas, hábitos de consumo de alcohol y antecedentes familiares de enfermedades del sistema nervioso.
  • Examen neurológico, revisaremos  los reflejos osteotendinosos, tono y fuerza muscular, capacidad para sentir ciertas sensaciones, postura y coordinación.
  • Pruebas y exámenes complementarios, podemos  solicitar las siguientes pruebas: análisis de sangre, análisis de la función nerviosa (estudio de neuroconducción y electromiografía), estudio de fibras delgadas (análisis sensibilidad térmica, sudoración), pruebas de diagnóstico por imágenes (resonancia, tomografía), biopsia del nervio, biopsia de la piel.

¿CÓMO SE PREVIENE Y TRATA?

La mejor manera de prevenir la neuropatía periférica es controlar las afecciones médicas que  ponen en riesgo de sufrir esta enfermedad.

            Los objetivos del tratamiento son  controlar la afección que causa la neuropatía y aliviar los síntomas. Los medicamentos que pueden aliviar los signos y síntomas incluyen analgésicos, anticonvulsivantes (gabapentina, pregabalina entre otros), antidepresivos (amitriptilina, duloxetina, venlafaxina), agentes tópicos y por último   la  terapia física.